30 inmigrantes mueren asfixiados en un barco en el canal de Sicilia. La Marina italiana remolca el barco en el que van hacinadas más de 600 personas.  Revuelcan en el polvo al desvalido y tuercen el proceso del indigente (Am 2,6-16). Cuando ves un ladrón, corres con él; te mezclas con los adúlteros; sueltas tu lengua para el mal, tu boca urde el engaño (Sal 50). Deja que los muertos entierren a los muertos (Mt 8,12-22).