En el principio era la palabra
 

Aunque no lo parezca, la visita del papa ha suscitado reacciones muy diversas. Por ejemplo: “Ha sido todo un éxito”, “una muestra del extraordinario soporte de fieles que la Iglesia tiene en España”, “contrasta con las filas vacías en los bancos de las parroquias”, “ha dado a la Iglesia española el impulso pastoral que le falta”, “se ha manifestado la incoherencia del Vaticano y de la Iglesia”, “no ha habido el más mínimo tirón de orejas por el papel jugado por nuestro Gobierno ante la guerra de Irak”, “ha sido una manifestación del nacionalismo católico español”, “le sirve al Gobierno como baza electoral” ante las próximas elecciones municipales y autonómicas. Se impone, por tanto, un adecuado discernimiento.